Annie tenía demasiados prometidos y ningún esposo.
A pesar de los deseos de su casamentero padre, el detective privado Cole Rafferty estaba felizmente soltero. Cuando Annie Bonacci acudió a él en busca de ayuda, Cole le propuso un trato: si se hacía pasar por su prometida, él haría el trabajo gratis. Lo que no sabía era que estaba a punto de convertirse en el tercer prometido de Annie... y pronto desearía ser su único marido.