Aunque soy famoso gracias a mis cuadros, he de decir que parte de mi celebridad la debo al hecho de haber conocido a muchas personas interesantes y de haber vivido muchísimos años, en una época apasionante y de una gran riqueza cultural. He tenido una vida intensa, en la que la pintura, las mujeres y los toros han sido mis principales pasiones, y en ocasiones mi perdición.