A Julio Santos, la vida de golpe lo llena de sorpresas. Su mujer se va dejando una nota. Su alrededor no es el que él creía. Todo se desmorona como una fila de fichas de dominó al caer una ficha detrás de otra.
Sin embargo, él lucha hasta el último aliento, sin que las sorpresas dejen de caer como la fina lluvia, intentando poner orden en ese desorden inesperado.