Para Donato Vittoria el matrimonio era un lazo para toda la vida. Había elegido a Grace como esposa, y estaba dispuesto a amarla siempre. O aquello era lo que ella pensaba.
Hasta que descubrió la traición de Donato con la bella María. ¿Tan pronto había olvidado los votos matrimoniales? ¿Es que esperaba de ella que desempeñara el papel de esposa atenta mientras él seguía con su vida de soltero? El dolor era tan insoportable que Grace huyó. Pero en opinión de Donato seguía siendo su esposa legítima y, estaba dispuesto a recuperarla a toda costa.