Tras quince años separadas, Agathe, guionista en Nueva York, vuelve a encontrarse con Véra, su hermana pequeña y afásica, en la casa familiar del Périgord en la que han crecido. Han acordado su venta y tienen nueve días para vaciar el lugar de objetos, muebles, ropa, libros. Las piedras de los muros antiguos servirán para restaurar el palomar vecino, devastado por un incendio que ocurrió hace más de un siglo. Véra se comunica con su hermana por escrito, mostrándole la pantalla del móvil. En esos días de reencuentro con el pasado, Agathe descubre que su hermana ha cambiado. Ella es quien ha cuidado de su padre hasta su muerte. Ahora es una mujer que cocina con agilidad, independiente, y Agathe no sabe bien cómo relacionarse con ella.
La Dordoña francesa es el escenario de la cuarta novela de -Elisa Shua Dusapin, la más personal de la autora hasta la fecha. A través de una mirada precisa y certera, rebosante de dulzura, Dusapin nos habla de
la memoria familiar y de la violencia de los sentimientos entre dos hermanas que el tiempo y el silencio había separado.