Su deseo de muerte lo convierte en uno de los agentes de asalto y táctica más codiciados de Londres. Hasta que una noche consigue lo que deseaba. Es herido, la sangre lo envuelve en susurros rojos y los recuerdos le muestran el camino hacia el cielo. O tal vez el infierno.
Pero entre gritos y helicópteros, una mujer le habla. Violeta le recuerda todo lo que amó y perdió. Ella le hace una promesa que marcará el curso de sus vidas para siempre.
Ella está llena de sueños. Él quiere morir. Pero su voz despierta los latidos. Latidos de un corazón muerto. Y quizá sea justo lo que necesita; vivir, sentir, sangrar… hasta que deje de doler.