Cuando el millonario Chaz Monroe se infiltró en la agencia que había comprado, tuvo que descubrir por qué Kim McKinley, su mejor empleada, no estaba dispuesta a trabajar en la importante campaña de Navidad. Para conseguir que aquella bella mujer se lo contara, estaba dispuesto a cualquier cosa… Y si tenía que besarla, lo haría.
Kim no podía creer que Chaz fuera tan osado. Enseguida, aquel hombre exasperante consiguió averiguar sus secretos, justo a tiempo de pasar una Navidad que ella nunca olvidaría. ¡Una Navidad insuperable para ambos!