En aquella fiesta de celebración de la fusión de la empresa de su padre con la de Cosby, Loris Bergman no podía dejar de pensar que uno de los asistentes le resultaba muy familiar.
Jonathan Drummond aseguraba que no se conocían de nada. A pesar del misterio que rodeaba al papel que desempeñaba en la empresa, una sola noche de pasión convenció a Loris de que estaba enamorada de Jonathan. Pero, ¿qué planes tenía él exactamente; de boda o de venganza?