Lady Celia Cleveden se consideraba una joven muy sensata, desde la punta de los zapatos hasta lo alto del sombrero. Lo lógico era casarse con un caballero igualmente práctico. Y así lo hizo. Cuando tuvo que ser rescatada por el enigmático príncipe del desierto, Ramiz de A'Qadiz, mientras viajaba por sus tierras, él le ofreció un lugar en su harén y lady Celia debería haberse sentido escandalizada, pero el desierto seductor y el embriagador Ramiz hicieron que su rígida mentalidad cambiara inevitablemente…