Rudolf Nuréiev (1938-1993) fue un bailarín clásico que nació en la Unión Soviética y está considerado como uno de los mejores bailarines del siglo XX. Bailarín precoz, comenzó muy tarde sus estudios de danza debido a la Segunda Guerra Mundial. Reconocido mundialmente, pudo salir de su país para bailar en ciudades de todo el mundo. En uno de estos viajes pidió asilo político y se estableció en Europa. Fue director del Ballet de la Ópera de París, donde se convirtió en una celebridad. Enfermo de sida, su temperamento rebelde y altanero le ayudó a sobrellevar la enfermedad con valentía hasta su muerte a los 54 años en 1993.