Historia Eclesiástica
La formación de la Iglesia desde el siglo I hasta el siglo III
Om bogen
¿Qué sucedió realmente tras la muerte de los apóstoles, testigos privilegiados de Jesucristo? ¿Cómo afrontó el cristianismo la cultura grecorromana? ¿Cuál fue el alcance y significado de las persecuciones? ¿Qué supuso la conversión de Constantino para la Iglesia?
Salvo los túneles de las catacumbas, las reliquias y algunos documentos sueltos, poco nos quedaría para poder conocer e investigar con exactitud los avatares del cristianismo primitivo de forma ordenada, con toda riqueza de detalles, de no haber sido porque la Providencia de Dios levantó, como hace siempre, el hombre adecuado en el momento preciso: Eusebio de Cesarea, considerado "el Padre de la Historia de la Iglesia".
Aunque se desconoce con exactitud su procedencia (su nacimiento se calcula alrededor del año 255 d.C), las primeras referencias que tenemos de el lo colocan en Cesarea (de aquí el apodo que se añade a su nombre), ocupado en las tareas pastorales. Era un hombre amante de los libros, y uno de sus objetivos principales fue ampliar y enriquecer la importante biblioteca que había fundado Origenes en esta ciudad que tenía ya cerca de ¡30.000 volúmenes!, y que fue puesta bajo su cuidado.
Eusebio escribió numerosos libros de apologética, de doctrina y de geografía bíblica –como su famoso "Onomasticón", en el cual hace una relación ordenada de los principales lugares de Palestina y los identifica. Pero su obra magna fue la conocida Historia Eclesiástica, que le consagró como el primer historiador cristiano. La mayor parte de los documentos de patrística, –crónicas y obras apologéticas, escritas durante los 250 primeros años de existencia de la Iglesia para tratar de defenderse de las persecuciones imperiales y contener el avance de herejías nacientes– se hubieran perdido en medio de la situación adversa en que las comunidades cristianas luchaban por sobrevivir, de no haber sido porqué, Eusebio, se dedicó ha realizar un recuento de ellos y a escribir un relato ordenado de los acontecimientos de la Iglesia Primitiva, desde los tiempos de Cristo hasta la época de Constantino.
El propio Eusebio nos explica el plan y propósito de su obra con estas palabras:
"Me he propuesto redactar las sucesiones de los santos apóstoles desde nuestro Salvador hasta nuestros días; cuantos y cuan grandes fueron los acontecimientos que tuvieron lugar según la historia de la Iglesia y quienes fueron distinguidos en su gobierno y dirección en las comunidades mas notables...añadiré a todo esto los incidentes que sobrevinieron a todo el pueblo judío desde el momento de su complot contra nuestro Salvador, y también de los paganos que lucharon contra la palabra divina así como la grandeza de los que en su tiempo atravesaron el martirio. Por tanto daré comienzo a esta obra partiendo de la dispensación de nuestro Salvador y Señor Jesús, el Cristo de Dios...pues quién pretenda redactar los origenes de la historia eclesiástica será necesario que empiece con la primera dispensación de Cristo mismo, ya que de El tenemos el honor de recibir su nombre...así pues, pedimos a Dios su dirección y la ayuda del poder del Señor...ya que hasta el momento presente somos los primeros en entrar en esta labor como intentando seguir un sendero desierto y sin hollar..."
Impresiona pensar que estas palabras fueron escritas por Eusebio apenas tres siglos después de la muerte de Cristo, en una epoca en la que la sangre de los mártires estaba tierna aún en circos y cárceles imperiales.