Jordi Pujol, cara y cruz de una leyenda
Om bogen
Jordi Pujol, que ha sido durante casi 25 años presidente de la Generalitat de Catalunya, sobresale entre el puñado de políticos que han configurado la España de la segunda mitad del siglo XX. Su fuerte personalidad -tan compleja y llena de matices muchas veces contradictorios- y su abigarrado cuerpo doctrinal e ideológico -en el que, de un modo muy particular, se funden nacionalismo catalán y pensamiento liberal con personalismo cristiano, europeísmo utópico y hasta con elementos propios del romanticismo alemán pero también de la épica y el mesianismo judíos-, son puestos al descubierto en esta obra al hilo de un sinfín de situaciones, anécdotas, peripecias y viajes narrados con una sorprendente mezcla de penetración y amenidad. Jordi Pujol, a la luz de los cambios producidos en Cataluña, ya es una leyenda viva, pero en ella cohabitan grandes espacios de claridad y amplias zonas oscuras. Son los pros y contras de toda obra política y las facetas contrapuestas que brillan en todo personaje público. Criticado por unos a causa de su moderación o de su pragmatismo, y por otros a causa de un nacionalismo considerado excluyente, o por una estrategia de la ambigüedad y de la reivindicación permanente, Pujol ha abandonado la Presidencia de la Generalitat de Catalunya con grandes y casi unánimes elogios por su liderazgo catalán pero también por todos los méritos contraídos como hombre de Estado al servicio de la estabilidad política española y el progreso general.