Amor salvaje
Tietoa kirjasta
Nochebuena del año 1985. Ese fue el día en el que todo cambió. Un atraco que no sale como esperas, por algo que no está bajo tu control, y tu vida cambia para siempre.
Nunca había conseguido establecerme en ningún sitio, adoptar una residencia y formar una familia. No es fácil domar a una bestia salvaje.
Pero, cuando me giré y la vi, supe al instante que era real; aunque lo cierto es que parecía un ángel.
Supe desde ese mismo instante que nada a partir de entonces tendría sentido si no estaba a su lado.
El fuego de su mirada era como gasolina para mi alma oscura.
A partir de ahora nada ni nadie podría separarnos. Nos compenetrábamos de tal manera que éramos como un solo ser. Cuando nos besábamos era pura química, un torbellino de amor que arrasaba con todo a su paso con el fuego de la pasión. El sexo y la muerte se unían como nunca antes había imaginado que fuera posible.
«La fortuna siempre favorece a los fuertes», pensé mientras la besaba, viendo cómo las llamas consumían aquel lugar maldito que nunca deberíamos haber pisado. Las armas estaban a punto. El viaje debía continuar, y nada podía separarnos.