Psss… Eh, sí, sí, te hablo a ti. A ti. Esto que vas a escuchar es una historia llamada Irse de casa (Mapa-poema para niñas que se portan mal). Yo soy su autora, la persona que lo escribió, hace ya algunos años. Escribir Irse de casa fue jugoso, divertido y bonito. Bueno, y también un poco terrorífico durante unos días, la verdad, porque pensaba que no iba a ser capaz de conseguir poner en el papel lo que tenía en la cabeza: todas esas imágenes que iban surgiendo sobre la ciudad, los vuelos espaciales, el calamar gigante de un solo ojo…