Una alimentación sana, realizar ejercicio físico y cuidar de forma adecuada la salud son algunos de los preceptos fundamentales para cualquier persona. Pero estos se convierten en prioritarios al alcanzar ciertas etapas de la vida.
Mantener una dieta equilibrada y adaptada a las necesidades de cada uno es indispensable cuando se llega a la tercera edad, ya que permite gozar de una buena salud, mantenerse en forma y afrontar la vida con dinamismo.
Esta guía práctica de la alimentación, pensada para las personas más mayores, proporciona útiles consejos y presenta de forma clara y sencilla las propiedades de los alimentos, así como los valores nutritivos y calóricos de frutas, verduras, alimentos proteínicos...
Además, encontrará en ella interesantes sugerencias, prácticos consejos y numerosas recetas con las que podrá elaborar platos sanos, ligeros y sabrosos, de fácil rea-lización, con los que podrá conjugar el placer de la mesa y la salud de una forma ejemplar.