Ratisbona fue el hogar de Ratzinger, en cuya universidad enseñó durante ocho años. Y allí dio un giro su pontificado, cuando pronunció un discurso como Benedicto XVI.
Partiendo de las relaciones entre fe y ciencia, el debate se amplió al mundo islámico, y a las mismas relaciones entre filosofía y teología en el nunca pronunciado discurso en La Sapienza.
Pablo Blanco Sarto, profesor titular de Teología sistemática, nos ofrece los textos y sus contextos.