Emma Worth cambió la vida de Chase Larson al decirle que estaba embarazada. El millonario había nacido fuera del matrimonio y no estaba dispuesto a que eso mismo le ocurriera a un hijo suyo. Sólo había una cosa que podría impedir que convirtiera a Emma en su esposa: la enemistad que había entre sus familias.
Ella nunca se habría imaginado que una sola noche con Chase los uniría para siempre. La heredera deseaba desesperadamente criar a su hijo juntos, pero sólo si Chase conseguía olvidar que eran enemigos.