Las instrucciones de la agencia de contactos fueron: solo tienes que presentarte a la boda. Yo te proporcionaré el novio.
Un matrimonio concertado era la única manera que Yasmin Carter tenía de salvar su empresa familiar de la bancarrota. Sin embargo, el guapo novio que la esperaba en el altar no era un desconocido para ella. Era Ilya Horvath y, desgraciadamente, era su rival en los negocios.
El carismático empresario decidió ganarse a su reacia esposa con toda la pasión posible… hasta que una escandalosa red de secretos amenazó con separarlos para siempre.