Tras la guerra civil española, el fundador del Opus Dei visita las ruinas de la residencia de estudiantes DYA, en la calle Ferraz de Madrid.
Solo cuenta con ese inmueble, con catorce hombres y dos mujeres, y una misión que apenas ha cumplido diez años de vida.
Es el momento de recomenzar.
El autor analiza la primera expansión del Opus Dei en la residencia de estudiantes de la calle Jenner de Madrid, y los primeros viajes a Barcelona, Zaragoza y Valencia, Valladolid, Salamanca y Bilbao, San Sebastián, Granada, Murcia, Gijón y Oviedo durante los años 1939 y 1940.