Este libro estudia detalladamente las obras de dos poetas modernos prototípicos: T. S. Eliot y Salvador Espriu. Su imaginario es comparable, puesto que se proyectaba desde su experiencia y cosmovisión personal así como desde su profundo conocimiento de la tradición literaria. Ambos revelan los paralelismos entre los contextos históricos y culturales en los que se crearon sus poemas y ejemplifican su propósito como poetas a la hora de preservar la tradición formada por sus predecesores y a la hora de suscribirse de un modo significativo a ella. El estudio de Dídac Llorens Cubedo lleva al lector a través de un viaje desde el árido desierto o la sórdida ciudad moderna hasta la paz imprecisa de un jardín ideal, desde las restricciones de lo secular hasta el todo sin trabas e intemporal imaginado por Eliot y Espriu, dos gigantes de la poesía.