Las obras filosóficas de Lucio Anneo Séneca (ca. 4 a.C.-65 d.C.) han ejercido un duradero influjo sobre la cultura occidental y contienen una formulación significativa de las ideas del estoicismo maduro.
"De la brevedad de la vida", dedicado a Paulino -quien probablemente era padre de su segunda mujer-, fue compuesto en el año 49 o 50. En él, Séneca afirma que la vida, aunque lo pueda parecer, no es breve, sino que es el individuo quien hace que así lo sea.
El tema principal de este ensayo es la vida y como los mortales nos dedicamos a vivir la misma. El autor enfatiza que nuestra vida sería más duradera si no dedicáramos tanto tiempo a asuntos vanos e inútiles.
Su propósito es crear conciencia para que nuestras vidas tomen la perspectiva de vivir al máximo; y no se nos haga tarde cuando, queramos dar marcha atrás al momento de la muerte.