Perico era un conejo muy inquieto. Era bastante distinto de sus hermanas, tres conejitas muy buenas y obedientes. Él no quería más que correr aventuras; y un día, desoyendo los consejos que le había dado su mamá, se metió en el huerto del señor Mac Gregor. Se lo estaba pasando de maravilla comiendo zanahorias tiernas, lechuguitas..., cuando, de repente... ¿Queréis saber lo que le pasó al travieso de Perico? Pues no lo dejéis para más tarde: escuchad este audiocuento.
Beatrix Potter creció educada por institutrices y por lo tanto no conoció a muchos niños de su edad. Pasaba sus días observando la naturaleza de Escocia, lo que le brindo un gran amor por los paisajes, la flora y la fauna. Sus estudios y pasión por pintar hongos locales la llevaron a ser muy respetada en el área de los estudios de hongos en una época en que las opciones de educación superior para mujeres era muy limitada. La escritora y científica vivió sus últimos días escribiendo por placer y trabajando sus tierras.