La historia del Rey Esarhaddon, situada en la Mesopotamia de los Asirios, se presenta en un ambiente de misterio profundo cuando un maestro poderoso revela inesperadamente al rey secretos vitales. La cruda realidad de la existencia se transforma y adquiere la ambigüedad del mundo de los sueños. El Conde León Tolstoi quiere mostrar cómo la violencia produce violencia, cómo la paz tiene que nacer en el corazón. En un mensaje digno de nuestra propia época, en que la violencia se ha apoderado de la imaginación y las vidas de muchos jóvenes, Tolstoi hace reflexionar sobre el valor de la vida y cómo nuestra propia vida depende de la vida de los demás. Las escenas del cuento de Tolstoi son magistralmente presentadas en originales ilustraciones que nos introducen en la atmósfera onírica creada por el autor.