Esta obra pretende manifestar la preocupación por las potenciales consecuencias negativas del proyecto de nuevos planes y programas de estudio (PPE) para la educación básica que la Secretaría de Educación Pública (SEP) dio a conocer recientemente. Los maestros, en su mayoría, ignoran los contenidos y las implicaciones de esta nueva reforma y experimentan un sentimiento de angustia por las nuevas cargas de trabajo que este cambio traerá consigo.
La SEP no solicita una reforma curricular convencional —como fueron las de 2011 y 2017—, y las autoridades plantean un reordenamiento completo de la actividad educativa sin un diagnóstico claro de los problemas relevantes y sus causas profundas. No hay antecedentes históricos, en México ni en el extranjero, de una educación comunitaria como la que se proyecta. Por ende, proponemos la fuerza social, que permitirá abrir un horizonte de esperanza para que los mexicanos construyamos una sociedad democrática en un estado de derecho, de justicia social y paz.