Escrita a continuación de "La de Bringas" en 1884, "Lo prohibido" es la novela en que Benito Pérez Galdós más se acerca a los postulados del naturalismo.
"Lo prohibido" es una de esas novelas rotundas de Galdós, sin fisuras, en las que una se sumerge hasta llegar al final sin tomar aire. Una novela, como todas las de Galdós, para no dejarse ni un garbanzo, de esos que tanto ofenden a alguno, en el plato.
En "Lo prohibido" Galdós realiza con maestría un cuadro de la buena sociedad madrileña de los años ochenta del siglo XIX. Sagacísimo observador, el autor supo reflejar en sus obras la realidad de una sociedad entregada a la ostentación, que gastaba lo que no tenía para aparentar lo que no era. Pero además, introduce un tema nuevo, el deseo masculino narrado en primera persona y la descripción de un hombre dispuesto a comprar aquello que desea, apartando la moral.
Narrada en primera persona, "Lo prohibido" recoge la llegada a Madrid de José María, un soltero con rentas que rápidamente se siente atraído por su prima Eloísa que, lamentablemente, está casada. Pero la hermosura y buenas prendas de la mujer hacen que la llama de la pasión sea inextinguible y ambos acabarán sucumbiendo y entablando una relación ilícita. No obstante, la pareja defiende la pureza de su amor: puesto que el marido de ella está gravemente enfermo, la situación se legalizará cuando el cónyuge muera y los amantes puedan santificar su relación.