Estas dos novelas cortas inauguraron el género en la literatura modernista finisecular. Tratadas de manera diferente,
Un calvario y
María del Consuelo abordan un tema que cautivó a los decadentes mexicanos: la enfermedad. En
Un calvario asistimos a la injusticia de la encarcelación perpetua de tantas mujeres dentro del claustro, a su incomunicación familiar y social, a la extinción absoluta de su inteligencia, a la amputación de sus facultades afectivas y fisiológicas, a la muerte civil en nombre de la Iglesia. La historia de
María del Consuelo, texto primerizo de Leduc, está inspirada en sus lecturas francesas e imbuida por los principios del romanticismo.