Basado en el ballet clásico de Piotr Ilich Tchaikovsky, este cuento nos sumerge en la magia de una noche de Navidad que da vida a los juguetes, armas a las ratas, esperanza a un cascanueces y aventuras a una tierna niña. La representación tradicional del mes de diciembre puede ahora disfrutarse y leerse durante todo el año. El testimonio de Luis Ortigoza, primer bailarín estrella del Ballet de Santiago, nos habla de los desafíos de bailar esta pieza.