Cristina Inogés acompaña la lectura de la Pasión en el evangelio de Juan, sigue el camino de Jesús hasta la cruz y se adentra en sus sentimientos antes de morir –fracaso, abandono, amistad, sed, anhelo de un abrazo, presencia luminosa de la madre–ofreciendo al lector sutiles pinceladas de esperanza en medio del dolor y la humillación de la cruz. Hace así una reflexión sincera y desgarrada, expresada casi en un susurro, convencida de que las cosas importantes se dicen en voz baja, y que se apoya en textos de Dietrich Bonhöffer, Dolores Aleixandre, Mercedes Arias Puente, Pablo Neruda, Luigi Gioia, Olivier Clément, Christian Bobin y la liturgia bizantina.