La alta sociedad neoyorquina se quedó atónita cuando el rico heredero Lucas Chandler anunció su repentina boda con una bella y misteriosa mujer llamada Alicia Sánchez. Por si eso no fuera poco, el antiguo playboy también iba a convertirse en el papá adoptivo de un pequeño de tres años.
Algunos afirmaban que sólo se había casado porque su padre le había amenazado con desheredarlo si no sentaba la cabeza de una vez por todas, pero cualquiera que viera a la pareja paseando por la ciudad podría darse cuenta de que estaban enamorados el uno del otro…