Los familiares de Flint Fortune estaban intentando ejercer de casamenteros, pero el vaquero errante estaba decidido a seguir siendo libre. Sí, claro, Jessie Hunt-Myers era una belleza, pero también era viuda y madre de cuatro hijos… en absoluto la pareja ideal para un soltero empedernido. Aun así, no pudo evitar fijarse en que su despampanante físico iba acompañado de un cálido y enorme corazón.
Jessie estaba de acuerdo en que no podían ser la pareja perfecta… y decidió seguir a Flint en su argucia: citas fingidas que harían que sus entrometidos familiares los dejaran tranquilos. Sin embargo, la química entre ellos era de todo menos forzada y fingida.