Una de las fuentes de inspiración de la poesía española ha sido el Cantar de los cantares. Fray Luis de León escribió en sus años jóvenes este comentario, obra maestra de la literatura española que –junto a Los nombres de Cristo y La perfecta casada– consagró a este agustino como uno de los principales representantes del Siglo de Oro español.
«Ninguna cosa es más propia a Dios que el amor». Así comienza fray Luis su exposición, que expresa con todo detalle los efectos del amor humano entre Salomón y la bella Sulamita. Ávido de conocimientos filológicos, humanísticos, exegéticos y literarios, fray Luis se adentra con rigor en el texto bíblico, que traduce del original, e interpreta y expone su contenido como un orfebre literario y un avezado del lenguaje teológico.