El Memoriale o Libro de la experiencia de Ángela de Foligno (ca. 1242-1308) constituye una de las obras más importantes de la mística europea medieval, además de que nos permite conocer, casi por primera vez en la historia, el mundo interior femenino. A pesar de no haber sido escrito por esta mujer analfabeta, una terciaria franciscana de la Umbría, sino dictado a su guía espiritual, resuena su voz potente para expresar una experiencia inefable, una peregrinación que se inicia con su desnudamiento ante la cruz, según el ideal de pobreza de las nuevas corrientes espirituales, para concluir en el punto sublime de conciliación de los contrarios.
Precursora de los grandes maestros de la mística renana como el Maestro Eckhart, su relato cautivó, entre otros muchos, a Georges Bataille que la bautizó como «Dama de la Noche».