El 16 de Setiembre de 1973, moría el cantautor Victor Jara en un pabellón deportivo de Santiago de Chile, donde se encarcelaron a miles de prisioneros durante el golpe de estado del general Pinochet, auspiciado por EE.UU. Tras masacrarle las manos a golpe de culata, le dispararon más de 30 balas. Solo pretendía cantar. Desde su publicación en 1998, este libro a recordado a las nuevas generaciones, que un día existió y que lo asesinaron por el simple hecho de cantar unas canciones por y para el pueblo.