El libro ofrece a los lectores una reflexión actualizada inmersa en la historia cultural del Chile de los siglos XVI, XVII y XVIII. En esta obra se estudia el contacto inicial entre españoles e indígenas en Chile y Tucumán, profundizando en temas de gran vigencia, tales como la alimentación y la sobrevivencia humanas, la violencia y la resistencia indígena en procesos de migraciones, como sucedió en el Cono Sur americano a mediados de la decimosexta centuria.