¿Cómo podría resistirse a su despiadada seducción?
Guido Barberi no había vuelto a ver a su exmujer desde que ella lo abandonó… llevándose consigo un cuarto de millón de libras. Pero nada más reencontrarse con ella se dio cuenta de que seguía deseándola, y qué mejor manera de vengarse de ella que convertirla en su amante…
Sara no podía creer que Guido hubiese mejorado tanto con los años. A pesar de lo mucho que lo odiaba, lo deseaba aún más que antes…