Compuesto en el s. VIII por Shantideva, célebre maestro budista indio, esta nueva traducción, realizada bajo la guía de Gueshe Kelsang Gyatso, nos transmite la gran lucidez y belleza poética del texto original al mismo tiempo que preserva su fuerza y visión espiritual.
Leer estas estrofas con detenimiento, contemplando su significado, produce un efecto profundamente liberador en la mente. Este poema despierta estados mentales positivos, nos ayuda sustituir el sufrimiento y las emociones conflictivas por estados apacibles y de felicidad, y nos introduce de manera gradual en el camino completo del budismo mahayana hacia la iluminación.