El propósito de esta obra es hacer propuestas para restablecer el equilibrio social desde la práctica educativa, y así generar una nueva cultura de convivencia. Desde la educación se puede lograr un gran avance para desarmar los espíritus violentos y de odio, y advertir las ventajas de vivir en paz. Escenarios como el de la familia, la institución escolar, los medios de comunicación masiva y el ejercicio del poder del Estado en las instituciones públicas pueden servir en esta mentalización y creación de los imaginarios de paz.