Un relato corto e inédito de Guillermo Galván, escrito especialmente para sus lectores en estos días de confinamiento, ambientado en los primeros días de la Guerra Civil española, en el que nos presenta al policía criminalista Carlos Lombardi, protagonista de
Tiempo de Siega y
La Virgen de los Huesos.
Madrid, 20 de julio de 1936.
El calor es asfixiante y las calles están revueltas después de los asesinatos del guardia de asalto José Castillo y, en revancha, del diputado monárquico José Calvo Sotelo. Se oyen noticias confusas sobre un ataque al Cuartel de la Montaña… Aunque la prensa da por sofocada la rebelión militar contra el Gobierno, el policía criminalista Carlos Lombardi no las tiene todas consigo. Interrumpirá sus cavilaciones funestas el aviso de su inmediato superior, el inspector jefe Balbino Ulloa: debe acudir al escenario de un crimen que ha tenido lugar en las mismas puertas del seminario conciliar.