El autor tiene una vasta y rigurosa formación teórica y lleva adelante una práctica profesional como psicólogo en el interior de un juzgado de menores. En este texto tiene una
aguda mirada sobre los procesos de desubjetivación que padecen nuestras infancias y adolescencias violentadas sexualmente. Pero sería injusto no enmarcar la oportuna llegada de este libro en las luchas políticas que vienen librando los feminismos, los colectivos LGTBQ+, los colectivos de familiares protectores, la Mesa Nacional contra el abuso sexual, los movimientos contra el backlash, junto a muchas otras organizaciones y sectores de la población para desenmascarar todas las formas en las cuales el poder patriarcal, en alianza con el capitalismo salvaje, intentan un crecimiento recargado.
Por eso quisiera rescatar entre tantos valores de este libro, el que su autor tenga la inteligencia y la sensibilidad de leer desde un pensamiento crítico, un sistema de poderes que se agazapan de manera infame en las mentiras del falso síndrome de alienación parental, para denunciar sus maniobras en el quehacer judicial.
Saludamos la aparición de este libro que resultará un aporte insoslayable, y que marcará un antes y un después en la formación y en la fundamentación necesaria para la elaboración de informes por parte de los profesionales peritos/as y para los/las que realicen entrevistas testimoniales en Cámara Gesell. También para las/ los estudiantes de las carreras de Derecho y Psicología en las universidades del país. Resultará además un material muy valioso para los/las psicólogos/as que reciben en sus consultorios pacientes que atravesaron un traumatismo sexual de cualquier edad.